Antes de juzgar mi vida o mi carácter...ponte mis zapatos, recorre el camino que he recorrido, vive mis penas, mis dudas, mis carcajadas...!!! Recorre los años que he recorrido y tropieza ahí donde tropecé y levántate así como yo lo he hecho...!!! Cada cual tiene su propia historia y entonces ahí podrás juzgarme!!!
(Patricia Elena Vilas, poeta de la República Argentina)

jueves, 2 de junio de 2016

DEDICATORIA

Quiero dedicar esta obra a los seres humanos que han
compartido conmigo los embates del ir y venir por mis naufragios:

A mi padre, José Antonio, —ya en el cielo— el ser más
noble y bello que he conocido, por su silencio sonoro 
y concluyente para hacer la vida más digna y lúcida.

A mi madre, Filomena, por su coraje y entrega para
hacer posible la vida entre tantas cruzadas.

A mis hermanos, Mariano, Charo, Inma y Javi, por su
complicidad y paciencia en todas mis cosas.

A Pablo Cecilio, el hijo que me hubiera gustado tener,
por la riqueza inmensa de su vida y hacerme comprender
la esperanza y la belleza, por ser el timón necesario para
continuar viviendo.

A Juan Garrido Gómez, mi médico, por su sabiduría, su
humanidad y alegría de vivir, por haberme enseñado a 
caminar nuevamente.

A mis mentores poéticos:

Javier Egea, Ángel González, Luis García Montero,
Álvaro Salvador, Trinidad Gan, Ángeles Mora,
Katy Parra y Antonio Praena, porque sin ellos
este libro no hubiese sido posible.


Y a la Orquesta Ciudad de Granada.