Una forma de amarte, ya resuelta
la terrible espesura, es no contemplar
tu semblante
y decir que tu nombre
es el tiempo de una tarde cualquiera,
una historia convulsa de ausencias,
un vértigo de amor orillado.
Cuando todo ha sucedido
ojalá que solo sea cierto
el silencio de la tierra.
Como si el tiempo no esperara,
vengo a pedirte urgentemente
que vuelvas,
que sin ti nada es igual,
que todo es ayer.
Porque alguien como tú, libre
como la verdad en sí misma,
con solo tu presencia justificas la esperanza
que sostiene mi único poema.
la terrible espesura, es no contemplar
tu semblante
y decir que tu nombre
es el tiempo de una tarde cualquiera,
una historia convulsa de ausencias,
un vértigo de amor orillado.
Cuando todo ha sucedido
ojalá que solo sea cierto
el silencio de la tierra.
Como si el tiempo no esperara,
vengo a pedirte urgentemente
que vuelvas,
que sin ti nada es igual,
que todo es ayer.
Porque alguien como tú, libre
como la verdad en sí misma,
con solo tu presencia justificas la esperanza
que sostiene mi único poema.